Durante el segundo debate presidencial, Claudia Sheinbaum Pardo, candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia integrada por Morena, PT y PVEM, inició su intervención advirtiendo sobre posibles difamaciones en su contra, aunque señaló que se enfocaría en presentar propuestas para mejorar el país.
Por otra parte, la candidata de la oposición, adoptando una postura más agresiva que en ocasiones anteriores, despliega una serie de ataques, incluso recurre a ataques personales, al llamar a Sheinbaum “la candidata de las mentiras” y “narcocandidata”. A pesar de todo eso, la candidata morenista, optando por evitar un enfrentamiento directo, la tacha de “la corrupta”. Además, destaca la importancia de promover un debate político basado en propuestas constructivas.
Sheinbaum también destacó su compromiso con la mejora de las condiciones de vida de los mexicanos, resaltando propuestas como la modernización del campo y la gestión del agua para su óptimo aprovechamiento. Además, se comprometió a aumentar los salarios y a desarrollar infraestructura, incluyendo la expansión de redes ferroviarias para pasajeros y la construcción de vivienda.
En el caso de Xóchitl Gálvez exdelegada de Miguel Hidalgo; mantuvo un hilo argumental lleno de denostaciones y acusaciones como en la que refirió al exmarido de la representante de Morena, Claudia Sheinbaum, cuando presuntamente habría recibido dinero del polémico Carlos Ahumada, situación que para la integrante de la 4T no era relevante pues, afirmó, ya había pasado mucho tiempo de eso.
