La partida entre Efim Geller y Anatoly Karpov en el 44º Torneo de la URSS en 1976 es notable por varias razones. Geller, un veterano jugador soviético, mostró su destreza táctica y habilidad posicional al derrotar al que aún no era campeón mundial(Karpov), pero que ya era reconocido como una figura prominente en el mundo del ajedrez profesional. La partida fue un enfrentamiento emocionante entre dos grandes maestros, y Geller logró imponerse con una combinación de juego sólido y un oportuno ataque en el momento adecuado. Su victoria fue una hazaña notable en el mundo del ajedrez, y esta partida en particular ha sido estudiada y analizada en profundidad por jugadores y aficionados al ajedrez durante décadas. La capacidad de Geller para aprovechar las debilidades de Karpov y convertirlas en una ventaja decisiva es un testimonio de su habilidad como jugador de ajedrez de élite.
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